Durante los últimos días la Embajada de Suecia ha notado interés sobre la forma en la que Suecia está combatiendo el nuevo coronavirus. Por eso acompañamos a continuación un texto explicativo al respecto.
El objetivo de las medidas de contención de Suecia del brote del coronavirus es el mismo que en otros países – salvar vidas y proteger la salud pública. Nos enfrentamos con los mismos desafíos y hacemos uso de instrumentos similares a otros países – fomentamos el distanciamiento social, protegemos a los grupos vulnerables y a los de riesgo, realizamos testeos y reforzamos nuestro sistema de salud. El objetivo es aplanar la curva de contagios y evitar que el sistema de salud se sobrecargue.
Las medidas consisten en una combinación de legislación y recomendaciones. El Gobierno de Suecia ha impuesto el cierre de fronteras, suspensión de clases en escuelas secundarias, prohibición de visitas a geriátricos y eventos de más de 50 personas. Instamos a que las personas que presentan síntomas de Covid-19 no vayan a trabajar, lo cual es posible a través de un seguro de salud extendido. Las medidas de Suecia difieren de otros países solamente en tres aspectos: nosotros no hemos impuesto un aislamiento social, preventivo y obligatorio, no hemos impuesto el cese de la actividad comercial a algunas empresas y no hemos cerrado jardines de infantes ni escuelas primarias.
La vida en Suecia no continúa como de costumbre. La economía sueca se vio fuertemente afectada por la pandemia y se espera un ascenso dramático del desempleo.
Una parte importante de las medidas de prevención de Suecia consiste en proporcionar a los ciudadanos información confiable que los ayude a asumir la responsabilidad de su propia salud. La base de esto es la confianza mutua entre las autoridades estatales y los ciudadanos que se ha ido construyendo a través del tiempo. A modo de ejemplo, la administración de las vacunas del calendario infantil sueco es opcional y ha alcanzado una cobertura de vacunación del 97% entre los niños de Suecia.
La decisión de mantener abiertos sectores de la sociedad está basada en consideraciones de salud pública en lugar de intereses económicos. Mantener las escuelas abiertas tiene, por ejemplo, efectos positivos en la salud infantil y permitir que las personas trabajen es positivo para la salud pública. Estas medidas también fortalecen la igualdad de género.
En esta situación, es difícil hacer comparaciones directas entre las medidas de contención que han adoptado diferentes países. Suecia tiene tasas de mortalidad por Covid-19 más altas que algunos otros países que han impuesto la cuarentena, y más bajas que otros que también han impuesto la cuarentena.
Esta es una nueva enfermedad y pasará tiempo antes de que sepamos qué modelos funcionan mejor. En Suecia estamos aprendiendo, por ejemplo, que hay una necesidad de proteger los geriátricos de manera más efectiva. Siempre estamos abiertos a dialogar con otros países para que podamos aprender unos de otros.